Casas Low Cost: antecedentes
No voy a profundizar en la evolución histórica de las casas low cost en particular ni de la arquitectura industrializada en general. Tampoco quiero aburrir con un análisis histórico, pero hay que remarcar que el low cost no es un concepto actual, aunque es cierto que en los últimos años se ha exprimido dicha denominación.Desde hace más de 150 años, las casaslow cost y las residencias de pequeña superficie, han sido una parte de las actividades arquitectónicas. De hecho, en 1851, el Príncipe Albert, comisionó la construcción en Londres de las “Model House Families” para la clase obrera, con un número muy importante de piezas prefabricadas, al mismo tiempo que las viviendas se desarrollaban en una superficie “anormalmente” reducida. Se redujeron costes, se optimizó la superficie, pero aumentó la calidad de los espacios, tanto interiores como exteriores, lo que sentó las bases de la arquitectura low cost. Este sector se hizo popular en el contexto de la revolución industrial, por lo que las casas low cost se han vinculado, desde un primer momento, a la arquitectura industrializada y prefabricada.
Pero… ¿a partir de qué cifra se considera que una casa es low cost?
Curiosamente, el modelo de low cost se aproxima enormemente a lo que entendemos en la actualidad como Big Mac. El diario británico “The Economist” publica un estudio anual en el cual se establece el coste promedio de la famosa hamburguesa en muchas ciudades del Mundo. Este dato, sirve con el propósito de facilitar la comprensión del cambio de moneda y las tasas de paridad de poder adquisitivo, así como la sobrevaloración e infravaloración de las distintas monedas. En definitiva: el Big Mac se ha convertido en una unidad de medida.
Además “The Economist” muestra el Big Mac como un elemento compuesto, ya que es un producto estandarizado e industrializado. Su precio es comparable a nivel internacional, y al igual que una vivienda, se produce con mano de obra y materias primas locales. Es más, no es un producto de lujo y puede ser ofrecido a prácticamente todo el mundo, exactamente como las casas low cost.
El límite superior de una casa low cost ha sido fijado en 42.000 hamburguesas. Para EEUU: 195.000 USD (166.000 €), 13.000.000 YEN en Japón (95.000 €), 2.000.000 de Coronas en Noruega (221.000 €), 3.000.000 en Coronas checas la República Checa (106.000 €), etc… En España estaría en153.000 €. Estos precios sólo son de la vivienda, sin acabados interiores ni valor del suelo: sólo de la prefabricación.
¿Se puede construir aún más barato?
En el contexto en el que nos movemos, es inevitable pensar, como empresarios, en cuál es el modo ideal de ajustar precios. Nos parece “excesivo” 42.000 hamburguesas para producir una casa low cost, o al menos puede parecer excesivo a nivel del cliente final. Nos gustaría ser capaces de conseguir lo que consiguen los fabricantes de tecnología electrónica: reducir los costes y los precios de sus productos constantemente.
Por otro lado no podemos olvidar que los arquitectos no podemos ser low cost companies, ya que no realizamos productos en serie, sino que somos artistas, artesanos, como los sastres que hacen trajes a medida… y todos sabemos que un traje a medida cuesta siempre más que uno fabricado en serie, que te lo pruebas y si te queda lo suficientemente bien te lo compras. ¿Sería posible la producción, más cercana a las empresas low cost, desde los estudios de arquitectura u oficinas técnicas?
Existe una demanda real por parte de la sociedad, sobre todo en los últimos años, de lo que venimos llamando casas Low Cost: buen diseño a bajo precio. Pero este tipo de arquitectura choca frontalmente contra la burocracia existente en España, que provoca un aumento de costes (visados, licencias, seguro de responsabilidad civil, etc…). Estos gastos se han incrementado en más de un 200% en los últimos años, debido a que se construye menos y a lo poco que se construye se le grava los gastos de estructura de colegios profesionales, administraciones, etc.
La arquitectura debe enfrentarse al reto de proyectar para el individuo su espacio personal, dentro de unos cánones de alta calidad que garanticen su bienestar y comodidad y con la mejor relación calidad-precio.
Pero entonces: ¿se puede o no se puede construir aún más barato? La respuesta es sí. Consideramos que sí es posible la producción cercana a las empresas low cost, desde un estudio de arquitectura o desde una oficina técnica, siempre y cuando no olvidemos cuáles son sus criterios fundamentales.
Características de una casa Low Cost
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Óptima utilización del espacio
Construcción barata = construcción compacta, compatible a su vez, con una construcción atractiva y de elevada calidad interior. Una casa low cost debe contar con una óptima utilización del espacio, con el correspondiente ahorro del volumende construcción.
Por ejemplo: renunciar a sótanos, hacer las cubiertas transitables, o realizar una distribución de forma que todas las piezas húmedas estén juntas, unificando prácticamente el 80% de las instalaciones, descartando largos recorridos de instalaciones interiores.
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Mínima relación superficie de fachada – volumen
Relacionado con el punto anterior, se trata de optimizar la relación superficie de fachada – volumen edificado – superficie habitable, lo que se traduce en menos tabiquería, menos instalaciones, menos revestimientos, etc. Una buena planificación que reduce considerablemente los costes de las casas low cost.
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Materiales económicos.
En particular en aquellas partidas más importantes dentro de la construcción, fachadas y revestimientos interiores, se debe conseguir algo que parezca lo contrario a barato y sea, en su lugar, un espacio equiparable a una obra de arte arquitectónica, que sorprenda por su elevado grado de habitabilidad.
Una casa low cost debe partir de una elección meticulosa, de acuerdo con los costes y la calidad, de los elementos y materiales de construcción que se vayan a utilizar, sin descartar el uso de nuevos materiales como por ejemplo:
- Materias textiles no tejidas para las fachadas
- Recubrimientos plásticos exteriores
- Viruta prensada como aislamiento
- Parrillas de enrejado metálico para suelos de terrazas y escaleras
- Cables de acero para antepechos y barandillas
- Suelos y tabiques con paneles de aglomerado barnizado
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La industrialización
La propia forma de construcción debe de evitar eslabones de trabajo innecesarios, lo cual solo puede ser posible en el caso de un sistema industrializado y preconcebido.
La industrialización tiene que luchar contra la memoria histórica de asociar las casas low cost con la arquitectura tradicional de muros de carga como sistema estructural que resuelve, al mismo tiempo, fachada y aislamiento acústico y térmico. Hoy en día se investiga en todos los sectores encontrándonos en el mercado por ejemplo con el muro de termoarcilla que resuelve dichos problemas de una sola vez.
Se trata de una lucha complicada en la que se tendrá que hacer valer características productivas y constructivas de bajo coste, como la estandarización en la dimensión de la estructura. El ladrillo fue el primer elemento industrializado y todos los ladrillos son iguales, pero permiten realizar construcciones muy dispares.
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Renuncia al lujo
Por supuesto, las casas low cost deben renunciar a la ostentación y el lujo, sobre todo en equipamiento, ya que estamos en la cuestión de que todo suma.
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Optimización de tiempos
Una planificación perfecta y concienzuda permite que las casas low cost se construyan en plazos de tiempo optimizados, de forma que disminuyan los costes indirectos por mano de obra. En definitiva, se trata de crear una buena planificación de los plazos de construcción y un control exacto de los trabajos, entre otros motivos, por el incremento del precio de los materiales de construcción.
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Buena orientación
Diseñar con una buena orientación solar generando espacios interiores más luminosos y que den la sensación de ser mayores de lo que son, reduciendo la demanda energética, así como con ventilaciones cruzadas estudiando los vientos predominantes. Esto se traduce en una mayor eficiencia energética de la casa low cost reduciéndose la necesidad de instalar equipos de climatización potentes.
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Construcción a un sólo nivel
Ahorrando el espacio y coste de la escalera así como la correspondiente superficie de acceso y realizando estructuras más livianas.
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Estructura protegida
Por requerimientos de normativa, las estructuras de las casas low cost, como las de todas las viviendas existentes, deben estar protegidas del fuego, para lo cual, intentado evitar los costes añadidos del ignifugado con pintura intumescente será necesario colocar dichas estructuras ocultas bajo algún elemento protector, como por ejemplo, paneles de yeso laminado.
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Homogeneidad
Cuanto más alta sea la cuota de componentes homogéneos que se utilice en la construcción y mayor sea el número de piezas que se adquieran, mejor precio se conseguirá para las casas low cost.
Las Casas Low Cost son el resultado de un gran trabajo en equipo
Para alcanzar la meta de construir casas low cost, debe existir desde el principio del proyecto hasta el final de los trabajos de construcción, una elevada disciplina por parte de las personas implicadas, lo que supone una ventaja de las empresas de trabajo industrializado frente a las de construcción “in situ” por la protocolización e inserción de los procesos de calidad en cada una de las etapas. Así, en cada uno de los 10 puntos analizados, el peso se va repartiendo entre diseñadores, jefes de equipo, jefes de producción, responsables de calidad, montadores, directiva, marketing, etc.
Todos, absolutamente todos intervienen para conseguir casas low cost, y el equipo de ABC Arquitectura Modular está acostumbrado a trabajar con edificios compuestos por muchas de estas premisas: unidades básicas, elevada cuota de componentes prefabricados, estandarización, etc. Otras son las que nos aportan nuestros partners: arquitectos, ingenieros, interioristas, diseñadores, etc. De ahí que busquemos colaboradores con los que conjugar un tándem perfecto en el que conseguir diferentes objetivos. Entre ellos, fabulosas casas prefabricadas.
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